Los alimentos sometidos a ingeniería genética o alimentos transgénicos son aquellos que fueron producidos a partir de un organismo modificado genéticamente mediante ingeniería genética. Dicho de otra forma, es aquel alimento obtenido de un organismo al cual le han incorporado genes de otro para producir las características deseadas. En la actualidad tienen mayor presencia alimentos procedentes de plantas transgénicas como el maíz, la cebada o la soja.
La ingeniería genética o tecnología del ADN recombinante es la ciencia que manipula secuencias de ADN (que normalmente codifican genes) de forma directa, posibilitando su extracción de un taxón biológico dado y su inclusión en otro, así como la modificación o eliminación de estos genes. En esto se diferencia de la mejora clásica, que es la ciencia que introduce fragmentos de ADN (conteniendo como en el caso anterior genes) de forma indirecta, mediante cruzamientos dirigidos.
La primera estrategia, la de la ingeniería genética, se circunscribe en la disciplina denominada biotecnología vegetal. Cabe destacar que la inserción de grupos de genes y otros procesos pueden realizarse mediante técnicas de biotecnología vegetal que no son consideradas ingeniería genética, como puede ser la fusión de protoplastos.
La mejora de las especies que serán usadas como alimento ha sido un motivo común en la historia de la Humanidad. Entre el 12.000 y 4.000 a. de C. ya se realizaba una mejora por selección artificial de plantas. Tras el descubrimiento de la reproducción sexual en vegetales, se realizó el primer cruzamiento intergenérico (es decir, entre especies de géneros distintos) en 1876. En 1909 se efectuó la primera fusión de protoplastos, y en 1927 se obtuvieron mutantes de mayor productividad mediante irradiación con rayos X de semillas. Finalmente, en 1983 se produjo la primera planta transgénica y en 1994 se aprobó la comercialización del primer alimento modificado genéticamente.
En el año 2007, los cultivos de transgénicos se extienden en 114,3 millones de hectáreas de 23 países, de los cuales 12 son países en vías de desarrollo. En el año 2006 en Estados Unidos el 89% de plantaciones de soya (o soja) lo eran de variedades transgénicas, así como el 83% del algodón y el 61% del maíz.
Beneficios
- Los caracteres introducidos mediante ingeniería genética en especies destinadas a la producción de alimentos comestibles que buscan el incremento de la productividad así como la introducción de características de calidad nuevas.
- Debido al mayor desarrollo de la manipulación genética en especies vegetales, todos los alimentos transgénicos corresponden a derivados de plantas.
- Cabe destacar que el empleo de variedades modificadas y resistentes a herbicidas ha disminuido la contaminación debido a estos productos en acuíferos y suelo,si bien es cierto que no se requeriría el uso de estos herbicidas tan nocivos por su alto contenido en glifosato (GLY) y amonio glifosinado (GLU) i no se plantaran estas variedades, diseñadas exclusivamente para resistir a dichos compuestos.
- Las plagas de insectos son uno de los elementos más devastadores en agricultura.
- Por esta razón, la introducción de genes que provocan el desarrollo de resistentes a uno o varios órdenes de insectos ha sido un elemento común a muchas de las variedades patentadas.
- Las ventajas de este método suponen un menor uso de insecticidas en los campos sembrados con estas variedades,lo que redunda en un menor impacto en el ecosistema que alberga al cultivo y por la salud de los trabajadores que manipulan los fitosanitarios.
Para que se obtienen vegetales transgénicos?
Actualmente existen, comercializados o en proceso avanzado de desarrollo, vegetales modificados para:
- Que tengan una vida comercial mas larga.
Resistan condiciones ambientales agresivas, como heladas, sequías y suelos salinos.
Resistan herbicidas.
Resistan plagas de insectos.
Resistan plagas de insectos.
La modificación mas interesante en animales sería conseguir vacas que incluyeran en la leche proteínas de la leche humana con efecto protector, como la lactoferrina.
Los expertos predicen que para el año 2005, el 25% de la producción agrícola en Europa lo será de productos genéticamente modificados. Habrá patatas con genes nuevos que impedirán al tubérculo absorber la mayoría del aceite en que se fríe, con lo que disminuirán las calorías que tiene una ración de patatas fritas. Habrá frambuesas que resistirán a las heladas y que se cultivarán en países que nunca pensaron en hacerlo. Habrá, posiblemente, plátanos transgénicos capaces de albergar en su interior vacunas. Habrá campos de un trigo especial, transgénico, que producirá la mejor de las posibles harinas para fabricar pan.
La bioctecnología de la alimentación será entre otras cosas, según sus defensores, una ayuda para los países en vías de desarrollo, que podrán resolver más fácilmente la mayoría de los problemas que tienen actualmente para cultivar determinados alimentos.
" los alimentos transgenicos son manipulados geneticamente creyendo q sera bueno para los humanos en parte puede ser geneticamente buenos pero puede traer consecuencias terribles para los humanos hay en casos q los alimentos transgenicos son buenos pero en otros no puede tener consecuencias o ser buenos "